Ubicada justo en el centro de la península de Yucatán, Valladolid es una pequeña y hermosa ciudad de estilo colonial conocida como “la capital del oriente maya”. Fue fundada en el año 1543 y se convirtió en un importante centro de la colonia.
Además de ser un bonito lugar para conocer, es un punto estratégico para tomar como base y desde allí conocer muchos lugares en los alrededores como Chichen Itzá, Ek Balam, las grutas de Loltún y varios cenotes.
Uno de los atractivos particulares de Valladolid es el cenote Zací ubicado a solo unas cuadras de la plaza central. Este cenote es abierto, por lo que el ingreso del sol permite el crecimiento de varias plantas flotantes. Para llegar es necesario únicamente bajar las pequeñas escaleras que le dan profundidad.
El cenote Zací es un símbolo de esta ciudad, ubicada al oriente de Yucatán, un prodigio de la naturaleza y una enigmática y emocionante aventura, por la magia que encierra en sus caprichosas formas rocosas y la leyenda que le rodea. Enclavado cerca de la plaza principal de la Sultana de Oriente, es uno de los cenotes a cielo abierto más grandes e impresionantes de la Península. El espejo de agua, en forma ovalada, tiene 28 metros de diámetro en la parte mayor y 25 en la menor, y la altura entre la bóveda y la superficie acuífera es de 26 metros. En torno a las paredes se han dispuesto estructuras de piedra en forma de escalinatas que permiten a los visitantes recorrer los alrededores y admirar amplia gama de peces de agua dulce. Las instalaciones del cenote Zací están abiertas todos los días del año, de 8 de la mañana a 7 de la noche.
A 3 km de distancia de Valladolid, en la población de Dzinup, se encuentra el Cenote X´Keken, nombre que lleva debido a la leyenda que le precede.
Para entrar al Dzitnup se debe bajar por las escaleras y entrar a una cueva donde se encuentra la gran poza de agua. La caverna tiene varios ángulos y hermosas formaciones naturales, estalactitas y estalagmitas. Un pequeño orificio en el techo de la cueva deja entrar un rayo de sol que cae en el agua, generando una atmósfera única.
Al entrar se dará cuenta que es un agujero estrecho, se debe a que es una caverna subterránea, pero al llegar quedara deslumbrado de la belleza natural. Este cenote tiene 3 entradas, barandales en los bordes así como algunas pequeñas gradas hechas de piedra que se encuentran ubicadas en la parte de afuera. Este Cenote Se encuentra abierto al público desde las de 7 de la mañana hasta las 5 de la tarde.
A tan solo un kilómetro del cenote de X´Keken se encuentra el Cenote Sambulá. Es una esplendorosa caverna subterránea que le dejara sin palabras por su belleza natural y lo espacioso del lugar. La gente que se encarga del cuidado de este lugar se ha encargado de limpiar y formar diferentes caminos que no solo conducen a la entrada del cenote sino también a sus puestos de artesanías, en el transcurso de la caminata puedes apreciar sus alrededores, y llenarte de buenas vibras por que se respira un ambiente de paz y de tranquilidad.
Para poder ingresar al cenote se debe bajar cuidadosamente por las escaleras que son hechas de piedra, al entrar encontrará un primer nivel en donde usted puede admirar desde lo más alto la vista espectacular del lugar y no dejará de admirarlo, siguiendo con el recorrido bajara al segundo nivel en escaleras hechas de madera, aquí podrá observar el interior desde otro ángulo, y para culminar bajará y ahí descubrirá una plataforma en donde si lo desea podrá nadar, esnorquelear, y hasta experimentar clavados en la parte más profunda.
Las aguas cristalinas color azul turquesa son iluminadas por un orificio en la parte alta de la caverna en donde podrá apreciar las raíces colgantes de un árbol que fue cortado en la superficie, sin embargo aún sigue vivo debido a que el agua lo mantiene alimentado, si observa el agua vera a los peces que ahí viven, también admirar en donde se encuentran sus partes profundas.
Sin duda una experiencia inolvidable visitar cualquiera de estos tres lugares y mejor aún si visita los tres.